lunes, 20 de octubre de 2014

¿Y los comentarios, apá?

Neta, neta, neta... ¿dónde van a parar todos los comentarios que Blogger no permite que se publiquen? ¿Se quedan flotando en la "nube", en el ciberespacio? ¿Se van al reino de los comentarios sin publicar? ¿Se pierden en el pantano, en un cementerio? ¿Se quedan al lado de los ángeles y diosito? (jajajajá, a veces me vuelo la barda. Hoy ando filosa, ¡agárrense!).

Hoy Blogger me ha quedado bien mal desde la mañana porque intenté publicar mi tarea en el blog del Taller de periodismo narrativo y cuando puché "Publicar": Error 503. ¡Así, de huevos! ¬¬
Intenté refrescar la página y se puso diva, intenté en el celular y lo mismo y hasta aquí, en-este-su-blog-de-confianza, tampoco me dejó responder al comentario de Daniel, pero nada más no se podía: Error 503.

Y una amiga intentó publicar un comentario y tampoco la dejó el reputísimo Blogger: Error 503.
Mira, Blogger, te quiero y te he sido fiel desde hace aaaaños (desde 2010, ¿o 2009?) pero no mames con tantas fallas, no me hagas odiarte... ¬¬

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Mi primer día de trabajo estuvo chido. Trabajé desde casa y me cayó como perlas porque aún me duele la garganta y hacía mucho frío aunque mañana ya retomaré la cobertura de eventos que tanto, tanto extrañaba andar de pata de perro, sólo le ruego a Tláloc que no haga llover mañana porque sino me va a dar mucho coraje. Mañana ya voy a la agencia a trabajar con mis coguorquers digitales.

FIN.

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