jueves, 23 de octubre de 2014

Buscando adoptar un chico (...que no sea intenso)

Soy muy fácil de hacer plática, siempre que haya interés y preguntas que me motiven yo seré una buena "conversadora" online. Empecé a platicar con varios chicos y, al menos, a mí me emocionaba poder conocer gente por este medio era divertido, así a secas.

(Debo admitir que no es la primera vez que ligo por internet, hace muchos años conocí a muchas personas en las salas de chat de Terra, ahí encontré a Roberto, un chico con quien entablé una bonita amistad que ha permanecido bien o mal por muchos años, nos conocimos cuando estábamos ambos en quinto año de prepa. Jamás pasó nada, pero él sí quería conmigo porque me lo dijo. Además en Hi5 también conocí a personas y por Facebook igual como a Luis, Benjamín, Paloma, Andrés, Jorge Luis, Poncho (los últimos son lectores de este blog), entre muchos otros. Así que esta experiencia no es muy nueva ni desconocida para mí).

Un par de días después me topé con Rafael, un chico de Sonora, guapo, inteligente y amable, sin embargo quiso que yo fuera su ama y él mi sumiso y eso no me agradó del todo. Además de que empezó a preguntarme si estaba enamorada de él... después de nuestra primera "cita" por Skype. Me buscaba mucho por mi correo o por Skype, por mensajes en la página, razón por la cual tuve que recurrir a la bonita (en serio es bonita) opción "Denunciar a este intenso" y ya me dejó de molestar... por ese medio. Sí, lo bloqueé de gtalk y también en Skype. Y hace rato me envió un mensaje porque modifiqué mi perfil, pero de eso hablaré más adelante.

Durante las primeras dos semanas interactué con muchos chicos como James, con quien me llevo chido y me pasa memes; otro Rafael con quien hablo poco aunque sustancial; Luisma que es como mi alma gemela pero está en el norte del país y platicamos chido, tenemos buen groove; Jair quien intentó convencerme de que DEBO creer en el amor y lo mandé a la mierda; y Eric...

Con este último tuve, particularmente, muchos dolores de estómago provocados por su intensidad (y él lo sabe). Creo que fue de los primeros con los que intercambié mi guatsap, así que un día se me ocurrió mandarle un mensaje de voz, me chuleó la voz y después me mandaba él mensajes y así, pero tiene una forma muy intensa de ver el mundo que no va tanto conmigo, entonces...

Empezó a intensear por saber de mí, de mi día a día, por analizarme mediante lo que leía en este blog e intentar crearse una imagen de mí que, quizá, no es tan acercada si se me analiza demasiado y con tanto detenimiento. Lo conocí: es un muchacho bastante normalón y atento; pero no es mi tipo y no lo digo sólo por el físico sino en muchos otros sentidos. No puedo estar tan aprisionada, eso me harta. Así que como a la semana exploté y lo mandé lejos y escribí para él un texto, ya saben una indirecta (ni se me da...); sin embargo, después volvimos a platicar pero ya poniendo ambos nuestros límites y ahorita nos llevamos muy bien (o eso creo).

El motivo, que él me comentó, fue que Eric nunca antes se había relacionado con alguien por estos medios: ¿cómo se hace?, ¿qué se dice?, ¿cómo se tratan?, ¿qué códigos se siguen?, ¿cómo se conoce a alguien por la red? Entonces, era su primera vez conociendo chicas, ya no digamos personas, chicas por la red y, la neta, no todos son expertos en ese tipo de interacción.

Y es cierto, hay personas que somos muy expertas en la red y para conocer personas por todos lados; pero ¿qué sucede con aquellos que ni online son hábiles? y lo más importante ¿hay reglas dictadas para dar el primer paso y escribirle un "hola" a alguien que visualmente nos gusta en una página?, ¿acaso la plática virtual no es una extensión de una real y física?

Aunque pendejamente creemos que tenemos una visión completa de una persona sólo por cómo nos escribe, por la frecuencia, por la atención y por los emoticones que nos incluye en el texto. También pensamos que los conocemos re bien nada más porque nos manda las fotos de una fiesta donde se ve guapa, sonriente, donde sólo se comparten esos momentos que son de pura felicidad, pero la red nos permite a todos y cada uno de nosotros esconder los defectos, esas cosas que no nos gusta: el mal carácter, los malos modos, la histeria, las obsesiones, los traumas, las depresiones, las complejidades y lo imperfectos que somos.

La red nos permite enamorarnos de todo aquello que deseamos, pero que no podemos ver ni conocer por completo... y Lu fue un poco prueba de ello.

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Hasta aquí la historia. No lo hago por balconear a nadie, eh. O igual y sí.
Ya mero viene Halloween *brinca de emoción*, saquen una fiesta que no tengo una y ya estoy pensando en mi disfraz, anden no sean gachos.

2 comentarios:

  1. Creo que todo lo resume lo último que pones 'la red permite enamorarnos de todo aquello que deseamos'. Quizás eso es lo que lo hace más peligroso. Y pregunta ¿esas personas de las que escribes saben que escribirías de ellas? O.o

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  2. Que pinche miedo eso de ligar por internet, justo acabo de ver la noticia de una stalker que se quedo atorada en la chimenea de un chico que conocio por la red y le queria "dar una sorpresa" igual y es porque nunca me fue bien en esos parajes, de lo demás: he aquí una fiesta que se ve tentadora https://www.facebook.com/events/1515271678710748/?ref_dashboard_filter=upcoming

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